15.12.19

The Beauty Inside


The beauty inside (La belleza interior), así se titula la película que en más de una ocasión  me habían recomendado, pero que, aún así, me negaba a ver hasta hace poco. Esto es debido a que los espectadores, aunque amantes del cine, podemos llegar a cometer el error, de como se dice comúnmente, juzgar un libro por su portada, ya que es cierto que lo que este título trasmite es que se trate de un añadido más a la colección de películas  que concluyen con que las apariencias no son importantes y que la verdadera belleza reside en el interior, y así puede ser, pero erróneo sería prescindir de esta película o cualquier otra solo por el mero hecho de creer saber de antemano el mensaje que pueda transmitir y dar por hecho que ya sabemos lo que nos puede ofrecer. Así que tras darle una oportunidad, pude disfrutar de una original historia que se presenta de forma realmente  interesante, puesto que el rol del protagonista de este filme es interpretado por un elevado número de actores, algo verdaderamente destacable. Dicho esto daré paso a exponer la trama de esta peculiar historia.
La película del director Baek Jong-Yeol basada en el libro “Cada día” de David Levithan  y de la cual se espera un remake estadounidense, narra la historia de Woo Jin,  un diseñador y fabricante de muebles que vive con una extraña condición, despertase cada día en un cuerpo diferente como bien explica en los primeros minutos de la película: “Hombre, mujer, anciano, niño, y a veces, un extranjero. Cada mañana me despierto con una cara diferente. Mi visión y  voz varían y tengo que ajustarme a eso cada mañana”. Con esto se expone lo que parece ser el principal conflicto de la trama, ya que como es de esperar,  esto le acarrea todo tipo de dificultades. Sin embargo, con el paso del tiempo, Woo Jin consigue acostumbrase a esta condición con la ayuda de su madre y su único amigo Sang Baek y sigue su vida intentado hacer lo que todos los demás. 
Pero el verdadero conflicto llega cuando aparece Yi Soo, una amable dependienta de una tienda de muebles, de la cual se enamora. A partir de este momento, Woo Jin se da cuenta de las verdaderas dificultades que lleva consigo su condición, no solo por la dificultad de conseguir ser correspondido, si no por la complicada tarea  de lograr proteger una relación sentimental.
Esta película es un drama de fantasía y romance, con un toque de humor que permite a los personajes respirar y convivir con sus conflictos interiores más fácilmente, caracterizada por ser cálida en todos los aspectos.
La historia se presenta de forma lenta, con un ritmo pausado pero conciso y con una banda sonora de las mismas características que lo acompaña a la perfección. 
En cuanto a la fotografía, la película se caracterizada por poseer una luz cálida  en casi todo momento, desde los reflejos del sol que se postran sobre los personajes en los amaneceres, hasta los rayos de luz provenientes de lámparas que los iluminan durante la noche; todo ello acompañado por una tonalidad de colores oscuros pero armoniosos, destacando el marrón de la madera que compone la mayoría de las escenas de la película.



En la película abundan los planos cerrados y  primeros planos que detallan las expresiones y sentimientos  de los personajes, especialmente el personaje de Yi Soo, con el cual se consigue crear un acercamiento y comprensión del mismo, mostrando en detalle las expresiones de sus sentimientos. Quizás este personaje sea el que más calidez le otorga a la película y quizás también con el cual mas se sufre. Si bien es Woo Jin el que vive su vida bajo esa condición, Yi Soo es la que debe lidiar con el peso de ofrecerle su total comprensión a la vez que asumir ser juzgada por los que la rodean .

Han Hyo Joo  hace una magnífica interpretación de una Yi Soo caracterizada por una conmovedora sonrisa que  mantiene con perfecta sutileza, tanto en los momentos felices junto a Woo Jin, como los momentos de más confusión, pero, a que pesar de ello, logra expresar cómo se siente realmente en cada situación gracias a la expresión de su mirada.



Lo mismo sucede con  Woo Jin, se nos muestran con detalle las expresiones, los gestos, las miradas que realizan los distintos intérpretes que caracterizan al personaje. 
Y aunque en ocasiones podamos sentir cierta confusión, ya que a este dan vida un importante número de actores y actrices de los cuales algunos, por factores como el género o la edad puedan desentonar con el personaje, lo cierto es que en la mayoría de ellos podemos ver a Woo Jin  identificado únicamente a través de su  personalidad. Esto último le añade sumo interés a la película, pues es impresionante poder darse cuenta del poder  de las expresiones, los gestos, las miradas, las palabras, es decir, de la presencia interior.
Para finalizar, me gustaría resaltar la idea mencionada al principio del texto, y es que The beauty inside refleja a su manera las dificultades por las que pasan todas aquellas personas ante la  incomprensión de los demás, pero que llama a mantener ese rayo de esperanza que en ocasiones ilumina cuando menos lo esperamos.